Es una de las ave más admiradas y respetadas en Portugal, por esta y otras razones que continúan reproduciéndose favorablemente en nuestro territorio.
La cigüeña blanca es una de las aves en Portugal, que goza de una situación muy especial, es decir, es muy popular. Siendo por naturaleza un ave migratoria, hiberna en nuestro país durante un período que abarca los meses de Marzo hasta Julio, cuando las proles voladoras superan entre los 50 a 75 días de existencia, lo que les permite acompañar a los padres hacia África.
En los V Censo de 2004, llevados a cabo en nuestro país, con el objetivo de hacer la encuesta el número de estas aves en nuestro territorio, se encontró que hubo un aumento notable en general de 133% respecto de 1994. Una impresionante cifra teniendo en cuenta que corresponde a 8205 nidos ocupados en Portugal, en comparación con 3302, equivalente a censos anteriores. Colocando así a la cigüeña blanca en una posición superior con respecto a la conservación de las especies.
Un factor que ha contribuido a la preservación de este ejemplar es el mantenimiento de algunas prácticas agrícolas, tales como el cereal de secano y los campos de arroz. En este último caso, hay unas concentraciones aún mayores de las aves a causa de la langosta roja de Luisiana, un crustáceo invasor depredadas en grandes cantidades por las cigüeñas blancas.
El centro y sur del país son en general las áreas con mayor número de nidos ocupados, con una mayor expresión paisajística en el Alentejo, de tal forma que estas aves ya forman parte de lugares idílicos de esta zona. Un hecho que no es ajeno a la admiración que obtuvo junto de los portugueses en general. Hasta hace poco, una pareja de cigüeñas blancas decidió aniñar por segunda vez en una finca privada en Viana do Castelo, una localización inusual incluso para este tipo de ave, y solo por esta razón los populares los protegen, tal es el afecto que sienten por la pareja .
Una de las mayores amenazas para la supervivencia de estas especies migratorias son los cables de alta tensión y metales pesados que se encuentran en concentraciones significativas en los campos de arroz donde se alimentan, en particular, que proviene de la contaminación por mercurio en el agua por la industria química, farmacéutica y minería. Sin embargo, según el Libro Rojo de los Vertebrados de Portugal, la situación de la cigüeña blanca es de poca preocupación, a diferencia de las otras poblaciones.