Carla Taveira se divide entre dos mundos, el derecho y las artes y ambos están intrínsecamente vinculados a su visión como artista y como ser humano. Sus obras tratan de deconstruir la realidad a través de diversos materiales con el fin de que sean únicos.
Desarrolla en paralelo el derecho y de las artes, cómo todo esto se ha procesado?
Carla Taveira: Comenzó como una broma. Siempre me ha gustado la pintura y surgió la hipótesis de tener acceso a las tintas, pinceles y empezar a pintar, luego evolucionó.
Ahora se dedica exclusivamente a las artes?
CT: No, me encanta lo que hago en términos de la ley y eso es una pasión. Las artes son un complemento que se ha convertido en algo importante desde un cierto punto cuando a la gente le empezó a gustar mis cuadros y así que tuve que empezar a trabajar más.
Entonces, cómo se define usted como artista?
CT: Es difícil hablar en términos de una definición. Tengo algunos temas y por lo general pinto lo que me gusta, por ejemplo, libros. Otros temas tratados son mis viajes.
Escribe diarios gráficos?
CT: No. Me gusta dibujar libros y creo que tiene que ver con la parte legal y disfruto de viajar tan a menudo que tomo fotografías de detalles de las fachadas de los monumentos, y los interiores son esos momentos que reflejan mi pintura.
Utiliza varias técnicas en su trabajo todo esto es también importante?
CT: Sí, porque si mis pinturas no tienen relieve ya no me gustan. Pinto, pero tengo que emplear mucho las manos, necesito moldear el material y el uso de cartón, madera, plástico, hilos, todo lo imaginable. Cuando termino el trabajo y es muy sencillo tengo que empezar a deshacerlo.
Hace una deconstrucción de su obra es eso?
CT: Exactamente, y en casi todos mis trabajo ay ese aspecto.
Debido a que no puede ser perfecto es eso?
CT: Tiene que ver con eso, si las pinturas son muy derechitas para eso tienes la fotografía, y no se retrata. Tienes que hacer algo diferente y esa es la idea.