Trabajaste en un primer momento como en casa.
LN: Bueno, la idea es tener un producto hecho a mano, tiene un público objetivo, que es alguien que disfruta de un producto diferente y mantener un carácter no industrial. Nuestro objetivo es tener una producción artesanal para garantizar la calidad.
Uno de los hilos de la tía Lhú son las cenas gourmet, que hacen gala de la cocina de los Azores.
LN: La cocina de los Azores y más allá. En este campo difieren ligeramente. Una persona que quiere hacer una cena en casa con amigos, o en su cumpleaños y no tiene una oferta de buena calidad, ahí entramos nosotros, la idea es esa. Ofrecemos una comida de una cocina basada en carne o pescado de los Azores y he tenido mucho éxito. Es casi como llevar la comida de mamá para la casa de la persona. En la actualidad hacemos cinco cenas al mes y hay un máximo de 25 personas. Más que eso no lo hago, porque salimos de nuestra zona de confort, que es la cocina casera.
Las recetas para las cenas donde las fuiste a buscar?
LN: Muchas aprendí de mi madre, por lo que ya cocino desde pequeña. Hay un producto de tía Lhú que ha tenido mucho éxito, son los dulces de leche y azúcar que hacía con mi abuela. Ella se murió. El hecho es que las personas deliran con este caramelo, porque se disuelven en la boca, no tienen aditivos, ni conservantes y son diferentes.
Cuál es tu próximo objetivo?
LN: Vamos a trabajar con Peter Café, que es originario de los Azores, y ahora tienen un espacio en Oporto. Se acercaron varios equipos profesionales, nos entrevistaran, porque ellos conocían nuestros productos y, obviamente, les intereso que fuéramos nosotros, porque yo soy de Azores y mi socio tiene inevitablemente una costilla azoriana. Voy a mantener la tienda de dulces exclusiva y Peter Café tendrá parte de la cocina de Azores con aperitivos, lapas, ganso y pequeños chicharrones. El objetivo es ser diferente del café original en la isla de Faial.