Este factor también fue acompañado por el guarda ropa?
AC: Sí, también siguieron esta tendencia, para tener la noción del paso del tiempo.
Cuál de estos personajes como actor te gustaría haber hecho?
AC: Yo no sé. A lo mejor cualquier uno de los dos hombres no me importaba hacer nada. A mí lo que más me gustaba es tener esa libertad de relacionarnos independientes del peso da la educación, convenciones y de opinión. Esta independencia de relacionarse sin consecuencias. Siempre existen, pero tomándolo sin drama.
Has cambiado el título?
AC: No, el título es el mismo. Yo no lo traduje, porque no pudimos encontrar nada que me satisfizo en portugués, que tuviese ese nivel de sofisticación y elegancia que tenía el título en inglés.
Pero cuando lo leemos tenemos una idea y finalmente la obra habla de otras cosas.
AC: La idea de “design” es un concepto de diseño para la vida. Es en el fondo lo que hacen, es una construcción, además de la vida profesional de cada uno. Su vida emocional, sin embargo, camina de manera diferente. El traductor me había sugerido "proyecto de vida", pero no me sonaba bien. "Design for a living" tiene toda una sofisticación que es intraducible.
De qué manera este texto llego a tus manos?
AC: Ha dos años puse en escena algunas obras cortas de Beckett. Me gustó mucho hacerlas, eran muy apegadas a mi vida, con una serie de muertes y fue una respuesta a mi dolor, una catarsis y con un título que también había retirado del autor, que era "mañana la felicidad", la idea de un futuro afortunado. Después de eso, me dio ganas de hacer una comedia. Había visto dos obras para teatro de Nöel Coward y de repente leo esto y que lo quise hacer, después de descubrir cuando fue escrito. Al mismo tiempo tenía miedo, porque era un tipo de teatro que nunca había hecho. Esta comedia es difícil porque es sofisticada, no el tipo de matarse de risa, sonríes y parece que no, pero los portugueses no están muy acostumbrados a este tipo de humor. Pero, en Lisboa en dos meses siempre hemos tenido una excelente adherencia del público.
Después de muchas obras y una amplia experiencia, como han sido estos años del teatro de la comuna?
AC: Han sido interesantes, estamos a pasar por un tiempo un poco difícil en el sentido de que el país también está en ese punto. Es una época compleja para todas las compañías de teatro, con reducciones de 30% y tuvimos que repensar y reestructurar la programación. Hemos pasado por muchas cosas, sólo puedo decir que el teatro nunca termina. A pesar de todas estas incursiones de la vida cotidiana, la gente siempre necesita la confrontación entre el hombre y el hombre, el espejo, para estar allí, que es muy inherente al ser humano y sólo el teatro puede serlo y tiene casi dos mil años. Es un ritual, una reunión, hay un intercambio que los actores dan y que sólo sucede cuando abrimos las puertas al público.
Contrariamente a lo que se dice existe público en el teatro?
AC: Hay siempre y no se irá. Es gracioso, es un fenómeno que ocurre en Lisboa que señale en conversación con personas del medio, es que la gente sigue viniendo al teatro. A partir de ahora, no sé, tal vez va a doler. Pero en los últimos meses del año, pensamos que la audiencia no vendría, con la Navidad y el fin del año, pero no. La gente siente la necesidad de ver espectáculos. Hay fenómenos de micro popularidad, que en diez días se pone en cena una obra, incluso hay gente que se queda de fuera, porque no tiene billete. Creo que es esta idea que ya no podemos permanecer en casa pensando en el horror y que hacemos? Hay una necesidad de responder, incluso a ver cosas que ocupan tu mente con otros conceptos.
Cuáles son tus próximos proyectos?
AC: Este año no voy a dirigir más. Voy a entrar como actor en la siguiente obra de la Comuna, será una coproducción con el Teatro de San Luis, de Jean-Claude Carriere, que se llama "La Controversia de Valladolid" a finales de Abril. En el próximo año pondré en escena un Shakespeare, tal vez el "As you like it."
http://www.comunateatropesquisa.pt/comuna/emcena/design/emCenaD.html