Es un homenaje a los portugueses, escrito por Jaime Cortesão.
Es uno de los libros que forman parte del plan nacional de lectura y muy bien por eso y una sugerencia más para leer a los más jóvenes. Esta es una historia de hombres encantados versados en las artes mágicas, obispos, guerreros y sirenas. Se trata de una fábula sobre las obras de casi legendarias de los portugueses que han durante mucho tiempo fascinado a generaciones de lectores. Es la génesis de la identidad nacional explicada a los más jóvenes, salpicada, por supuesto, de mucha fantasía. La narración se basa principalmente en la historia de dos personajes de Don Froiaz y Doña Marina, un amor que funde la tierra y el mar. Es una bella metáfora para Portugal y su vertiente Atlántico, un país sobre el mar. De hecho, la novela tiene una componente marítima muy fuerte, hay una estrecha relación entre los personajes y los descubrimientos portugueses. Es una lectura que recomiendo a un público más joven, no solamente por la prosa, sino por su entorno y por la magia de un enredo donde hay encantadores, ondinas y moros que flotan por las islas encantadas accesibles sólo a unos pocos y que no aparecen en los mapas. También es una interpretación muy personal de las leyendas de los Azores y de Madeira, de ahí el nombre de islas encantadas y un ejemplo hermoso, que sirve para contar la hazaña de nuestros héroes antes de acostarse. Buena lectura y buenos sueños!