Una innovación en la tintura de las prendas de vestir fue presentada por la Universidad de Miño.
Una de las grandes tendencias es la ecología y la industria es cada vez más conscientes de este fenómeno social que ha ido creciendo fruto del cambio climático y de las mentalidades. Se trata de un problema mundial que nunca ha sido tan de moda como ahora. Pero esto no es sólo un concepto pasajero. El mercado está exigiendo cada vez más serios cambios en los paradigmas de consumo, más que eso, es necesario que los productos ataquen y sean menos contaminantes del medio ambiente. Mediante la combinación de todos estos resultados que obtenemos? Nanotecnología.
La industria textil es una de las más contaminantes del planeta debido a los procesos convencionales de teñido que requieren grandes cantidades de sal, agua y energía y al final todavía "brindan" los ríos y sus afluentes con colorantes que impiden la propagación luz esencial para los ecosistemas fluviales. Teniendo en cuenta todo lo que he mencionado antes, un grupo de jóvenes futuros científicos consideraran la posibilidad de crear un proceso que permita teñir las telas sin contaminar el medio ambiente y al mismo tiempo gastar menos recursos energéticos. El resultado es nanogreen, una partícula de sílica microscópica que no es absorbida por la piel humana, que se disuelven sin causar daños en el agua, ríos, que no es contaminante y en términos de transformación industrial dispensa la sal, el agua y la energía.
La idea nació en la Universidad de Miño, dirigida por el profesor de ingeniería textil, Jaime Gomes y su equipo de jóvenes investigadores con esta innovación buscan cambiar el paradigma de la industria mundial de la tintura. Varias marcas internacionales en la búsqueda de estas nuevas tecnologías han demostrado estar interesados en los resultados de esta investigación, ya que los clientes no se limitan a la exigencia de una etiqueta que afirmar respetuosos del medio ambiente las prácticas son también muy importante y tienen como objetivo promover un ecosistema global sostenible, pero sobre todo, por razones económicas que ahorran recursos sustanciales en comparación con el proceso de tintura convencional. Piense en el futuro, al fijarse en cualquier pieza de ropa en su armario, el color viene de una idea portuguesa. Ah, y el medio ambiente agradece!