Es una de las capitales más alternativas de Europa, pero no todo es como parece.
Amsterdam es una ciudad interesante, pero con algunas contradicciones. Las apariencias engañan. Uno de los puntos obligatorios y poco destacado en la capital, es el Museo Amstelelkring, más conocido como el Señor en el ático, es una casa que en su interior es una capilla católica, confundido? Lo explico, cuando los movimientos protestantes barrieron Europa, los holandeses respondieron a la convocatoria y nació la Iglesia Reformada Neerlandesa. Entonces, cómo había persecución religiosa a los no cristianos, la infame Inquisición, los holandeses, a su vez, perseguían a los católicos en su territorio. Había una familia de comerciantes muy ricos, que continuó en secreto a practicar su propia religión mediante la construcción de un pequeño altar en casa, que era también un lugar de culto para otras familias católicas. Fueron descubiertos, juzgados y despojados de su fortuna. Eso fue hace tiempos, y hoy, Amstelkring es un símbolo de la intolerancia religiosa.
La casa de Ana Frank. Parada obligatoria, pero tienes que levantarte temprano para visitarla, las colas dan la vuelta a la cuadra y el propio espacio es muy pequeño. Es una casa antigua. Yo estaba muy emocionada durante la visita, había leído el diario y, por supuesto, estaba allí para verlo con mis propios ojos y trate de imaginar lo que significaba vivir en un ático, ocultos de un mundo intolerante. Me encontré con un grupo de judíos americanos, que me contaron sus experiencias de vida. Como fue haber perdido amigos, familiares y hermanos de corazón en una guerra sin sentido. Me emocionó de verdad, por suerte espero no pasar por esa terrible experiencia, por otra parte yo me sentía privilegiada, porque estaba oyendo la historia narrada en la primera persona. En la planta baja, no dude en entrar, tienen una pequeña habitación interactiva sobre el tema de la intolerancia en todas sus formas y que nos hace pensar.
Los maestros de la pintura son una deliciosa opción. Sé que hay un amplio espectro de personas que piensan que un verdadero tormento perder una tarde mirando cuadros viejos, pero no puedo resistir tanta belleza. Cuando miro a una de estas obras de arte pienso que hay algo verdaderamente divino en la forma como los artistas interpretan el mundo. Los movimientos frenéticos en los paisajes. Los colores intensos que perpetúan el momento. Una tarde en Arles por Vincent van Gogh. En la casa de Rembrandt apreciamos los utensilios, las figuras y modelos que el pintor había utilizado en sus cuadros grandes, que se pueden ver en el famoso Rijksmuseum.
El paisaje urbano muestra la gran habilidad en ingeniería de los holandeses. Son los famosos canales que serpentean la ciudad y un recordatorio constante de que este pequeño país está por debajo del nivel promedio del agua de mar. Debido a la escasez de tierras disponibles, la ciudad construye sus grandes edificios sobre estacas y muchos de los ciudadanos debido a los altos precios de las casas, viven en los barcos que pueden observar en esas vías acuáticas. Una de los comportamientos más curiosos de la gente, es que no tiene cortinas en las ventanas, y no es una cuestión de luz, por el contrario, los holandeses creen desde la antigüedad, sólo aquellos que ponen cortinas tienen algo que ocultar! Otro hábito cultural más o menos interesante, es que el comercio no cierra a mediodía y, como tal, la gente come en el trabajo, no es raro en absoluto que alguien tenga un plato de pasta en el balcón y coma mientras habla con usted. Los holandeses son muy prácticos, por decir lo menos.
La famosa calle de la luz roja es un bloque dedicado a la prostitución. Las chicas en ropa interior fluorescente propagan sus servicios a través de las ventanas de las casas. Es una zona segura para salir, por otra parte, es una de las más turísticas, por lo tanto, está fuertemente vigilada. También ofrece, espectáculos de striptease y sexo al vivo, acompañado de banana splits, adivinen el por qué! Los alquileres son muy altos en esta área. Es una de los más caros de Amsterdam, por eso los precios cobrados por las chicas son muy altos, una triste noticia para todos aquellos que tienen limitada capacidad financiera. Lo sentimos.
Los coffe shops no venden café como todo el mundo debe saber. La marihuana es legal en esta ciudad y, como tal, hay una gran variedad de hierbas y ácidos de venta libre, que atrae a numerosos turistas. Si son cafeína dependientes, es decir, si toman café, prepárate! No sólo no lo venden en estos lugares a pesar del nombre, como si deciden beber tienen que prepararse psicológicamente para el horror que ellos llaman de capuchino. El agua potable se recicla en toda la ciudad y, como tal, no sabe a nada ergo el café es horrible.
La gran obsesión nacional son los tulipanes. Los Países Bajos es uno de los mayores exportadores del mundo de flores. Ellos manipulan y crean especies que se venden en grandes cantidades para los mercados internacionales. Sepan que si quieren conquistar el amor de las mujeres holandesas ahí que presentarlas con flores, es un hábito más frecuente de lo que se piensa! Dejando de Amsterdam, Keukenholf es un parque con 32 hectáreas de zonas forestales floral. En la primavera, miles de tulipanes florecen en todos los colores y tamaños, y hay más, hay viveros para las rosas. Los invernaderos son perfumados, con numerosas especies nuevas, una verdadera oda para los sentidos y, extrañamente, invadido por las hordas de japoneses con cámaras en la mano. Nunca he visto tal concentración. Era el último lugar donde esperaba encontrarlo, pero entonces me acordé, son personas que aprecian la belleza en todos los sentidos. En los mercados al aire libre, se venden de todo. Productos de todo el mundo, incluyendo bacalao seco. Imagínese!